Mónica Montañés se desafía a sí misma con su próxima telenovela llamada Amor a primera vista. Su nuevo título fue escrito en su totalidad antes de entrar a producción.

La autora dice que esta forma de trabajo le resulta inédita. "Me permite un nivel de cuidado en los detalles y de pensar muy bien todo lo que va a ocurrir".

Este modelo de concebir previamente la historia, tampoco le ofrece, en tanto escritora, la opción de ver cómo funcionan los personajes en pantalla. Es decir, no hay posibilidad de variar la tensión a medio camino.

Montañés sostiene que cuando se va escribiendo en simultáneo una telenovela, el ‘apuro' de estar al aire no permite hacer correcciones que a veces quisieran (y necesitan) realizarse.

Amor a primera vista será una telenovela de 120 capítulos. "No hay chance de que la alarguen, pues la voy a terminar sin estar al aire. Ahora en Venevision estamos trabajando así, porque se está produciendo una sola novela a la vez. Da miedo porque no sabes cuál será la aceptación del público".

El título de Mónica Montañés viene precedido de otros que ha escrito la también periodista: Guerra de mujeres (2001), Voltea pa' que te enamores (2006), ¿Vieja yo? (2009), Harina de otro costal (2010), Válgame Dios (2012)

"Tengo un abanico de protagonistas, lo cual me encanta porque me permite indagar sobre el amor a distintas edades", dice sin puntualizar nombres de actores para su nuevo proyecto. "Tengo una ‘prota' de 20 años, otra de 30, otra de 40, otra de 50 y hasta una de 60, con sus respectivos galanes acordes a su edad... o no (se ríe). Mi idea es hablar de lo distinto que es el amor según la edad que uno tenga, porque no es la misma ilusión, ni el mismo miedo, son distintas las expectativas según la experiencia. A veces el amor es a primera vista y otras a la primera risa o la primera conversa o viene después de haberse visto mucho".

Aunque no maneja fecha de estreno, espera que sea el próximo año. Advierte, eso sí, que la telenovela no ha entrado en producción. Ante esa coyuntura, resulta aventurero precisar el horario (vespertino o nocturno) que se dispondrá para Amor a primera vista.

Lo que tiene claro la escritora son los nombres de las parejas protagónicas, además del gran villano. Están Ana y Guillermo, Marilda y Luisito, Lázara y Carlos Enrique, Nancy y Beltrán, Carlota y Conrado. "Pero, quizá, el verdadero protagonista es Onofre Villahermosa (villano) que conduce los hilos de todos".

Montañés prefirió ejercer la maldad a través de un personaje masculino. "Después de mi querida Marbelis (Carlota Sosa) de Válgame Dios no quise escribir otra villana. Marbelis me resulta insuperable todavía. Y creé un villano que es malísimo y sumamente inteligente. Es un gran reto porque es el que enreda a los demás como si fuera un juego de ajedrez y me obliga a tratar de ser tan inteligente como él".

La inclusión de un antagonista con tales dimensiones hace que Amor a primera vista sea distinta a sus otras telenovelas. "Tiene mucho suspenso y hasta miedo. Nunca había trabajado un villano como Onofre Villahermosa que es de verdad un delincuente muy peligroso, entre otras cosas porque no lo parece. Su presencia me obligó a tener personajes policías y periodistas de sucesos. Tiene un tinte de novela negra o policial que me apasiona. Y es un reto novedoso para mí porque tengo que mantener un equilibrio con las tramas románticas que no deben perderse. Y estoy muy contenta porque hasta ahora, capítulo 95, lo he logrado. Es una novela vertiginosa que te mantiene en vilo, comiéndote las uñas por lo que va a pasar. Al menos en libreto".

Más allá del suspenso prometido, para Mónica Montañés la telenovela tiene una intención superior, entretener. "Porque este oficio es para eso: entretenimiento. Pero, a mí me gusta hacerlo logrando que la gente que vea mi trabajo se identifique con los personajes, que sienta que los conoce, que se vea reflejada, que los sienta cercanos. Y siempre con humor para que sean gratos de ver".

Argumenta que si el espectador se identifica y divierte con los personajes, entonces no coloca barreras a aquello que le están contando. Esto le abre, como autora, la posibilidad de dejar mensajes, tocar temas que considera importantes, dar información y brindar la posibilidad de una reflexión.

"Como bien sabes yo siempre hablo del embarazo precoz, de la paternidad irresponsable, porque lo considero un grave problema de salud pública, y la telenovela es uno de los mejores instrumentos para hablar de eso, tratar de dar buenos ejemplos, reflexionar sobre los malos ejemplos, hacer pensar".

En el caso de Amor a primera vista, detalla que abordará temas que cree valiosos. Se habla de violencia doméstica como algo inaceptable. Se toca, a través de un personaje, el peligro que se corre con los implantes mamarios, el uso del botox y la práctica de las cirugías estéticas innecesarias. Se aborda el rescate de perros y gatos de la calle, promoviendo la adopción de mascotas callejeras y mestizas en contra de la compra de animales de raza.

"Me meto con el bullying y el problema que esto representa en los colegios y, sobre todo, hablo del empoderamiento de la mujer, pues todas mis ‘protas' trabajan, estudian y se apasionan por lo que hacen, no solo por sus hombres (se ríe). En fin, tiene de todo, así que espero que quede buena".